Pequeño Luciano

No te encontraba, me perdi en la entrada, pero al poco andar di contigo y tus infinitos ojos de pena y miedo, estabas ahi con tubos que salian de tu pequeño cuerpo, con los ojos abiertos por confundirme con quienes te hacian daño, palabra tras palabra logrè tu confianza y todo fue mas facil.

El corazon se me apreto al verte tan delgado y sin color, tus mejillas no tienen ese rosa habitual que denotan horas de juego y alegria, tus brazos acusan el dolor de haber tenido tantas conexiones que te mantenian a salvo, la fiebre ya bajò, tu estomago se empieza a recuperar lentamente y la infeccion va en retirada dejando tus pulmones limpios.

Tu madre esta contigo, incondicional, amor del mas puro, aguantando el hambre, las largas horas, la tristeza y la enorme preocupacion de verte ahi tendido, se te dificulta el respirar y tus piernas ya no aguantan tu cuerpo, justo ahora que ya caminabas como loco, habra que tener paciencia para enseñartelo otra vez.

Di gracais al cielo por no tener que pasar por eso con guagui, pero me pongo en el lugar de tu madre y mi dolor es gigante, imagino la angustia que debe sentir al tener que dejarte por las noches, sin poder consolarte cuando despiertas llorando solo en un lugar frio y desconocido.

Habra que esperar por lo menos un par de dias mas para que vuelvas a casa y termines de recuperarte, mientras, yo estare rezando por ti para que mejores, y por tu madre para que no le falten fuerzas ni esperanza.

Mi pequeñito Luciano, que Dios te bendiga y nunca te abandone.

Mi niño, te espero en casa para el cumpleaños de guagui, mejorate pronto!!!